El Testamento Espiritual (escrito entre 1891 y 1899) es un documento de fundamental importancia para conocer la riqueza del mundo interior de San Leonardo Murialdo. El nos narra la crisis juvenil, vivida durante su permanencia en el colegio de Savona, y el progresivo descubrimiento del amor misericordioso de un Dios que continuaba a amarlo mientras él, Leonardo, había decidido abandonarlo. Allí describe su camino de conversión y de fe y narra su “historia de salvación” hecha de pecado y de perdón, de ingratitud y de reparación, de arrepentimiento y de deseo desantidad. Es una profesión de fe en Dios “por la grandeza y la inmensidad” de su misericordia; un canto de reconocimento a Dios por su “bondad y generosidad”; un himno de confianza y de esperanza en Dios “tan bueno, tan paciente, tan generoso”; una oración serena y de corazón que quiere testimoniar “toda la amargura y la sinceridad de su arrepentimiento”; un grito de amor a Dios de parte de un corazón que quiere amar a Dios en modo “infinito”, pero que se siente incapaz. Es la “historia de su alma” en la cual cada cristiano encuentra algo de su propia historia de pecado, de perdón, de amor.
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